David Lodge
INTERCAMBIOS. HISTORIA DE DOS UNIVERSIDADES
Barcelona, 1997, Anagrama.
“Entre tanto, en el otro Boeing, Morris Zapp acaba de descubrir qué era lo que tenía aquel vuelo que le intrigaba tanto desde hacía rato. La revelación ha llegado -con cierto retraso- tras recorrer el avión en toda su longitud hasta el lavabo, cuando concluía el negocio que lo había llevado allí. Mientras regresa verifica su sospecha, mirando disimuladamente cada fila de asientos, hasta llegar al suyo, en la parte delantera del avión. Se deja caer pesadamente en el suyo y, como suele hacer al reflexionar: cruza las piernas y tamborilea con las uñas sobre la suela del zapato derecho.
Todos los pasajeros del avión, excepto él, son mujeres.
¿Qué se puede deducir de ello? Las posibilidades de que esta proporción sea puramente casual son infinitamente pequeñas. ¡Otra vez la Improvidencia! ¿Cómo va a tener oportunidad de salvarse si hay algún peligro, puesto que las mujeres y los niños tienen preferencia y debería ceder el paso a ciento cincuenta y cinco personas para llegar a los botes salvavidas?” (pp. 37-38)
[Las cursivas pertenecen al texto.]
“En realidad, pensaba que no sentiría la menor pena aunque no volviera a poner los pies en Nueva York en su vida. En la última visita llegó a la conclusión de que sólo era cuestión de tiempo que la basura de las calles llegara al nivel de los áticos y toda la población muriera asfixiada.” (p. 50)
”-¿No crees que es más bien pequeña?
-A mí me parece estupenda.
-Últimamente pienso que es más bien pequeña.
-Un estudio reciente demostró que el noventa por ciento de los hombres norteamericanos creen que sus penes son de tamaño más pequeño que la media.
-Me parece muy natural que se quiera formar parte de ese diez por ciento que está por encima de la media...
-Ese diez por ciento no está por encima de la media, tontaina, a ese diez por ciento le importa un pito cómo tienen el ídem. Además, estadísticamente es imposible que haya un noventa por ciento que esté por debajo de la media en nada.” (p. 196)
[Las cursivas pertenecen al texto.]
INTERCAMBIOS. HISTORIA DE DOS UNIVERSIDADES
Barcelona, 1997, Anagrama.
“Entre tanto, en el otro Boeing, Morris Zapp acaba de descubrir qué era lo que tenía aquel vuelo que le intrigaba tanto desde hacía rato. La revelación ha llegado -con cierto retraso- tras recorrer el avión en toda su longitud hasta el lavabo, cuando concluía el negocio que lo había llevado allí. Mientras regresa verifica su sospecha, mirando disimuladamente cada fila de asientos, hasta llegar al suyo, en la parte delantera del avión. Se deja caer pesadamente en el suyo y, como suele hacer al reflexionar: cruza las piernas y tamborilea con las uñas sobre la suela del zapato derecho.
Todos los pasajeros del avión, excepto él, son mujeres.
¿Qué se puede deducir de ello? Las posibilidades de que esta proporción sea puramente casual son infinitamente pequeñas. ¡Otra vez la Improvidencia! ¿Cómo va a tener oportunidad de salvarse si hay algún peligro, puesto que las mujeres y los niños tienen preferencia y debería ceder el paso a ciento cincuenta y cinco personas para llegar a los botes salvavidas?” (pp. 37-38)
[Las cursivas pertenecen al texto.]
“En realidad, pensaba que no sentiría la menor pena aunque no volviera a poner los pies en Nueva York en su vida. En la última visita llegó a la conclusión de que sólo era cuestión de tiempo que la basura de las calles llegara al nivel de los áticos y toda la población muriera asfixiada.” (p. 50)
”-¿No crees que es más bien pequeña?
-A mí me parece estupenda.
-Últimamente pienso que es más bien pequeña.
-Un estudio reciente demostró que el noventa por ciento de los hombres norteamericanos creen que sus penes son de tamaño más pequeño que la media.
-Me parece muy natural que se quiera formar parte de ese diez por ciento que está por encima de la media...
-Ese diez por ciento no está por encima de la media, tontaina, a ese diez por ciento le importa un pito cómo tienen el ídem. Además, estadísticamente es imposible que haya un noventa por ciento que esté por debajo de la media en nada.” (p. 196)
[Las cursivas pertenecen al texto.]