sábado, 29 de junio de 2013

Eduardo Galeano
PATAS ARRIBA. LA ESCUELA DEL MUNDO AL REVÉS
Madrid, 2009, SIGLO XXI.


“Las masas consumidoras reciben órdenes en un idioma universal: la publicidad ha logrado lo que el esperanto quiso y no pudo. Cualquiera entiende, en cualquier lugar, los mensajes que el televisor transmite. En el último cuarto de siglo, los gastos de publicidad se han duplicado en el mundo. Gracias a ellos, los niños pobres toman cada vez más Coca-Cola y cada vez menos leche, y el tiempo de ocio se va haciendo tiempo de consumo obligatorio. Tiempo libre, tiempo prisionero: las casas muy pobres no tienen cama, pero tienen televisor, y el televisor tiene la palabra. Comprado a plazos, este animalito prueba la vocación democrática del progreso: a nadie escucha, pero habla para todos.” (pp. 330-331)

"Unos antropólogos recorren los campos colombianos de la costa del Pacífico en busca de historias de vida. Y un viejo les pide:
-No me graben a mí, que hablo muy feo. Mejor a mis nietos.
Muy lejos de allí, otros antropólogos recorren los campos de la isla de Gran Canaria. Y otro viejo les da las buenas horas, les sirve café y les cuenta historias alucinantes con las más sabrosas palabras. Y les dice:
-Nosotros hablamos feíto. Ellos sí que saben, los muchachos. Los nietos, los muchachos, los que hablan bonito, hablan como la tele." (pp. 377)

William Ospina
EL PAÍS DE LA CANELA
Bogotá, 2008, Grupo Editorial Norma. 


“Pero uno sólo ve con nitidez lo que dura: un mundo que no cesa de cambiar apenas si produce en los ojos el efecto de un viento.” (p. 29)

“Aparecieron un día en las planicies amarillas que rodean el Titicaca, el más alto de todos los mares. Se llamaban Manco Cápac y Mama Ocllo Huaco; traían una cuña brillante de una vara de largo y dos dedos de ancho, que según algunos era una barra de oro macizo y según otros era un rayo de luz que había puesto en sus manos el Sol, y en cada región que cruzaban intentaban hundirla en la tierra. No preguntes de dónde procedían porque en las montañas cada quien tiene una respuesta distinta para esa pregunta, pero todos estuvieron siempre de acuerdo en que eran hijos del Sol. Recorrieron los llanos de polvo, entre montañas blancas, recorrieron las cumbres pedregosas y los cañones resecos por donde resbala un hilo que alguna vez fue de agua y ahora es de arena interminable, recorrieron desiertos donde las pobres arañas tejen sus telas en la noche sólo para atrapar al amanecer unas mezquinas briznas de rocío, cruzaron la landa y la puna fracasando siempre en su intento de sembrar aquel objeto luminoso. Sólo cuando iban cruzando el cerro de Huanacauri ocurrió lo que esperaban: la cuña se hundió sin esfuerzo en el suelo y desapareció sin dejar rastro: era la señal para que los mensajeros fundaran allí su residencia.” (pp. 39-40)

“Dirás que soy ingrato con Pizarro, el jefe militar de mi padre, pero yo sé lo que te digo: los hombres valientes son demasiado confiados y los traidores son demasiado engañosos; el rey y el papa están muy lejos, y dedicados a sus propias rapiñas, para imponer aquí de verdad la ley de Dios o de la Corona; esta conquista sólo se abre paso con crímenes y muy tardíamente intenta redimirse con leyes y procesiones. Aquí sólo triunfan los peores. La Corona acepta que avancen con saqueos y masacres, y después llega a ocupar lo conquistado y a tratar de castigar a los criminales que lo hicieron posible. (…) Los mansos no heredan esta tierra, más bien han sido los primeros en perderla.” (pp. 56-57)

“Sólo cuando se convierte en relato el mundo al fin parece comprensible. Mientras los vamos viviendo, los hechos son tan agobiantes y múltiples que no les encontramos pies ni cabeza. O tal vez tiene razón Teofrastus, quien me dijo que lo que les da orden a los recuerdos es que ya conocemos el desenlace, que los vemos a la luz del sentido que ese desenlace les brinda. Al soplo de los hechos, todo va gobernado por la incertidumbre, y los únicos seres que parecen coherentes son aquellos que, a falta de saber cómo terminarán las cosas, tienen claro un propósito que buscan imponerle a la realidad. A cada paso eligen en función de lo que persiguen, les resulta más fácil optar entre alternativas y tomar decisiones, saben escoger con resolución un camino y prescindir de otro.” (p. 106)

sábado, 22 de junio de 2013

Miguel Torga
CUENTOS DE LA MONTAÑA
Madrid, 2001, Alfaguara.


“Casta, con el mismo frescor de rocío que humedecía la fruta de sus pomares, la aldea se despertaba después de una noche de sueño y de ensueño. El primer hilo de humo subía ya del hogar de Joao el Ra, el madrugador de la aldea. Ascendía blanco, perezoso, con temor de la brisa fría de la mañana. Pero, en cuanto llegaba al cielo abierto, tomaba aliento, extendía los brazos y se disolvía voluptuoso en el éter perfumado del aire. De las alquerías nacían voces confusas de la Babel animal. Y por los quicios honrados de los portales anchos y francos, iban surgiendo caras humanas y cristianas, prontas para una nueva romería de sudor.” (p. 272)
[La cita pertenece al relato El regreso.]

sábado, 8 de junio de 2013

R. C. A. Parker
EUROPA 1918-1945
Madrid, 1980, Siglo XXI.


“El problema crucial es explicar por qué los alemanes, cuyo gobierno era responsable de las matanzas, permitieron que éstas se llevaran a cabo. Una pregunta fundamental es ésta: ¿Cuántos alemanes sabían lo que estaba pasando? Desgraciadamente, es imposible contestarla. Por aquella época, había poderosas razones, como el miedo al castigo o a aceptar responsabilidades, para evitar averiguaciones sobre las actividades de las SS y la policía. A partir de 1945, el deseo de disculparse indujo a hacer profesión de ignorancia. Cualquier respuesta a esta pregunta solamente puede ser provisional o insegura. El gobierno alemán no proclamó lo que estaba haciendo; por el contrario, muchos de los responsables directos tomaron cuidadosas medidas para engañar a la opinión pública e incluso para engañarse a sí mismos: hablaban y escribían de la «emigración» judía, de la «repoblación oriental», de la «solución final de la cuestión judía y así sucesivamente».” (p. 408)

“Sería equivocado considerar a todos los alemanes responsables de las atrocidades de los nazis y, aunque esto fuera posible, sería equivocado considerar a los alemanes como seres dotados de un talento innato para el mal. El significado histórico del régimen nazi es muy distinto: demuestra la bajeza en la que pueden caer unos seres humanos civilizados, integrados en una sociedad altamente organizada. El concepto que la humanidad tenía de sí misma, nunca volverá a ser el mismo.” (pp. 411-412)

domingo, 2 de junio de 2013


Stephen King
MIENTRAS ESCRIBO
Barcelona, 2001, Plaza y Janés.


“A menudo escribir bien significa prescindir del miedo y la afectación.” (p. 101)

“Escribir es seducir. La seducción tiene mucho que ver con hablar con gracia. Si no, ¿por qué hay tantas parejas que empiezan cenando juntas y acaban en la cama?” (p. 106)

“Si pensando en la Legión de la Decencia, pones «¡caray!» en vez de «¡joder!», infringes el contrato tácito que hay entre el lector y el escritor: las promesa de que expresarás verazmente los actos y las palabras de tus semejantes por el canal de una historia inventada.” (p. 145)

“Los aspirantes a censores son legión, y aunque no coincidan todos en sus prioridades, a grandes rasgos quieren todos lo mismo: que veas el mundo como ellos… o, como mínimo, calles lo que ves diferente. Son agentes del orden establecido; no tienen por qué ser mala gente, pero sí peligrosa para el adepto a la libertad intelectual.” (p. 145)
Fernando Marías
EL MUNDO SE ACABA TODOS LOS DÍAS
Sevilla, 2005, Algaida.


“La botella está ahora ante mí, sobre la mesa del saloncito. Horror líquido tras el vidrio de forma armoniosa, adornado por una etiqueta elegante cuyo diseñador habrá cobrado un buen pico. Se diría, se podría decir, que también la botella me observa a mí. Dos horas mirándonos, puede que tres. Tres horas, puede que cuatro: hay amores que se llaman eternos y son menos intensos.” (p. 13)