sábado, 12 de enero de 2019

Pedro Baños 
ASÍ SE DOMINA EL MUNDO (I) 
Barcelona, 2017, Ariel. 


“Pekín, en fuerte rivalidad con las otras grandes potencias e impulsada por sus deficiencias estructurales, busca alternativas en el mundo exterior, comenzando por la inmediata Luna. A menos de 400.000 kilómetros y tres días de viaje, el suelo selenita es rico en aluminio, titanio, neón, hierro, silicio, magnesio, carbono y nitrógeno. No es descartable que incluso se pueda obtener agua a partir de elementos presentes. Pero quizá su valor más destacable sea la confirmada presencia de ingentes cantidades de helio-3 a ras de suelo que pueden extraerse sin dificultad. Este isótopo no radioactivo, rarísimo en la Tierra, está considerado como la futura principal fuente de producción de energía mediante la fusión nuclear. Según algunas estimaciones, se podría acceder directamente a unas cinco toneladas de helio-3 lunar. Aunque puedan parecer poco, con ellas se podrían obtener 50.000 veces la energía eléctrica que se consume anualmente en todo el mundo. 
   Pero la verdadera conquista del espacio se materializaría con la llegada del ser humano a Marte. En el impresionante planeta rojo ya se ha confirmado la existencia de al menos tres millones de metros cúbicos de hielo de gran pureza en su superficie y de posible agua líquida en sus entrañas. Con características muy similares a la Tierra, Marte se convierte en el lugar ideal para albergar un amplio asentamiento permanente de humanos, lo que serviría para aliviar la creciente presión poblacional o como refugio alternativo en caso de desastre terrestre —natural o provocado—, y permitiría establecer una base para proseguir la imparable colonización espacial.” (p. 46) 

“Como algunos apuntan con gran cinismo, los préstamos internacionales no se conceden para que sean devueltos, sino precisamente para que no lo sean, pues es una forma de asegurar la dependencia y la sumisión del país deudor.” (p. 63; nota 9 al pie)