J. R. R. Tolkien
EL SEÑOR DE LOS ANILLOS (III)
Barcelona, 1977, Minotauro.
“¡Aquellos fueron grandes días! Hubo un tiempo en que yo pude caminar y cantar el día entero, y sólo oír el eco de mi propia voz en las cuevas de las colinas. Los bosques eran como los bosques de Lothlórien, pero más densos, más fuertes, más jóvenes. ¡Y el olor del aire! A veces me pasaba toda una semana ocupado sólo en respirar.” (Tomo I; LAS DOS TORRES; p. 89)
EL SEÑOR DE LOS ANILLOS (III)
Barcelona, 1977, Minotauro.
“¡Aquellos fueron grandes días! Hubo un tiempo en que yo pude caminar y cantar el día entero, y sólo oír el eco de mi propia voz en las cuevas de las colinas. Los bosques eran como los bosques de Lothlórien, pero más densos, más fuertes, más jóvenes. ¡Y el olor del aire! A veces me pasaba toda una semana ocupado sólo en respirar.” (Tomo I; LAS DOS TORRES; p. 89)