Jesús Antonio Rojas
EL AÑO DEL MONO
Málaga, 1995, Diputación de Málaga.
“Ah el Jardín del Rencor,
qué pútridas sus flores...!” (p. 45)
“Cualquier pluscuamperfecto de subjuntivo
ama en su vida a variados complementos circunstanciales
que invariablemente le suelen abandonar
intentando conocer el resto de la conjugación.” (p. 57)
“PECES SIN PAN
A Javier Florén
En algún rincón de las vaguedades del sueño
existe un mar de mercurio donde divagan
telúricos peces de metal. Articulados o no, vivos
o fósiles, de carnes aceradas o esqueletos
rasposos, el proceloso líquido que los mantiene
no permite la existencia (o la comprensión de la
existencia) de ningún otro espacio ajeno al
suyo: son los peces inasequibles al hombre
común: son los que alimentan, precisamente,
las vigilias del Artista y del Místico, los peces
metálicos de la imaginación y el desarraigo, la
opuesta frontera al pan de la tierra.” (p. 162)