Wade Davis
LOS GUARDIANES DE LA SABIDURÍA ANCESTRAL (IV)
Madrid, 2020, Punto de Vista.
“Todas las culturas son etnocéntricas, apasionadamente leales a su propia interpretación de la realidad. De hecho, muchos nombres de comunidades indígenas se traducen como «la gente», lo que implica que cualquier otro ser humano es una no-persona, es un salvaje más allá del reino de la civilización. La palabra bárbaro, deriva de la palabra griega barbarus, que significa el que balbucea. En el mundo antiguo, el que no hablaba griego era un bárbaro. Los aztecas tenían la misma noción. Todo aquel que no fuera capaz de hablar el náhuatl, no era humano.” (p. 194)