Juan de la Encina
(seudónimo de Ricardo Gutiérrez Abascal; 1883-1963)
RETABLO DE LA PINTURA MODERNA (I)
Madrid, 1971, Espasa-Calpe.
“El autor, por razones especiales que no son del caso, se halla ahora completamente apartado del ruido y barullo que todavía se arma en torno a las artes y espera no incurrir en la flaqueza de retornar a él. Cree que el mundo o mundillo artístico padece de una descomunal hipertrofia de palabrerías -palabrerías que no hay que achacar solamente a la crítica al uso, o al servicio de marchantes, sino, y no menos, tal vez más, a los mismos artistas-. Estamos en la era del reclamo, de la propaganda, es decir, en la de la mentira interesada que no repara ni en medios ni en fines.
De ese modo, si el arte descaece, la crítica agoniza, si no ha muerto ya, a no ser la de aquellos que cultivan la historia de las artes, que ésta todavía está viva y no ha perdido su antigua dignidad, aunque tal vez sí su antiguo vigor. Existe, al parecer, una especie de confabulación tácita de artistas, marchantes, críticos y público ignaro para acabar con todo conato de crítica verdadera. Y lo cierto es que lo van consiguiendo. El refugio del crítico que sienta la dignidad de su oficio será de aquí en adelante, si Dios no dispone de otra cosa, el cultivo de la historia y la teoría del arte.” (pp. 16-17)