Voltaire
CÁNDIDO
Barcelona, 1995, Muchnik.
“Pangloss enseñaba la
metafísico-teólogo-cosmolo-nigología. Demostraba admirablemente que no hay
efecto sin causa y que en éste, el mejor de los mundos posibles, el castillo
del señor barón era el más hermoso de los castillos y la señora la mejor de las
baronesas imaginables.
<<Está
demostrado, decía, que las cosas no pueden ser de otra manera, ya que, estando
hechas para un fin, todo conduce necesariamente hacia el mejor fin posible.
Notad bien que las narices fueron hechas para llevar anteojos, así pues tenemos
anteojos. Las piernas fueron visiblemente hechas para ser calzadas, y tenemos
las calzas. Las piedras fueron hechas para ser talladas y para hacer castillos,
por eso monseñor tiene un hermoso castillo; el barón más grande de la provincia
debe ser el que esté mejor alojado; y los cerdos fueron hechos para ser
comidos, y por eso comemos puerco todo el año. En consecuencia, los que han
dicho que todo está bien han dicho una tontería; hubieran debido decir que todo
es lo mejor posible.>>” (pp. 12-13)