martes, 7 de enero de 2025

Juan Ramón JIménez
MELANCOLÍA (1910-1911)
Madrid, 1912, Tip. de la "Revista de Archivos".
www.archive.org

 

“...Cuando sale la luna, los pájaros se duermen
y sólo queda la memoria de las voces...
una memoria desteñida y deshojada
lo mismo que una de esas estampas interiores...” (p. 98)

[La voz velada, II, cuarteto final.]


“Anochecido, grandes nubes ahogan el pueblo;
los faroles están tristes y soñolientos,
y la luna amarilla camina, entre aguas y viento.

Viene un olor á campo mojado. Algún lucero
surge, verdoso, tras un campanario viejo...
El coche de las siete pasa... Ladran los perros...

Al salir al camino, se siente el rostro lleno
de luna fría... Sobre el blanco cementerio,
en la colina, lloran los altos pinos negros.”
(pp. 157-158)

(Tercetos melancólicos, X.)